Ben Edmunds: Everything we already had
Everything we already had es una estrella dentro de la constelación de proyectos recientes de Ben Edmunds.
¿Demasiado cursi? Sí, demasiado fácil. Espera, voy a empezar de nuevo.
Everything we already had llega solo cuatro meses después de la exposición individual debut de Ben Edmunds en L21, presentada a principios de este año en Palma. Las piezas incluidas en ambos proyectos formaban parte de un gran conjunto de obras y fueron por lo tanto creadas al mismo tiempo, cortadas con la misma tela durante las mismas sesiones de teñido.
Entonces, ¿cómo se pueden diferenciar los dos proyectos? ¿Y es realmente necesario? Podríamos pensar en ellos como proyectos hermanos, como la relación fraterna que existe entre los espacios de L21 en Palma y L’Hospitalet (Barcelona).
OK, ¿qué tal así?:
La primera exposición de Ben Edmunds en Barcelona nace de Closer to the Wind, la exposición individual del artista en la Galería L21 de Palma en enero de 2022. En la exposición se presentó su obra reciente, concebida en torno a una pregunta central en su práctica: ¿cuál es el propósito de una obra de arte?[1]
Esto suena mejor. Transmite la idea de los últimos proyectos de Ben y la vincula a su primera exposición individual con nosotros. Pero, ¿cómo puedo nombrar la exposición en L21 Factory? ¿Un tallo, un brote, una variación, un satélite? Me gusta la idea de un satélite. Gira en torno a las mismas ideas de la exposición de Palma, pero tiene su propia autonomía, desarrolla nuevos significados.
- Me lanzo.
Objetivo, significado y funcionalidad son conceptos que emanan de la contemplación de las obras seleccionadas para la exposición. Los lienzos, ya sean teñidos o blanqueados, se sujetan al bastidor con el mismo tipo de materiales que se utilizan para fabricar equipamientos de aventura. Encontramos fibra de carbono, tornillos, hebillas, mosquetones, cuerdas elásticas y ojales que reemplazan al tradicional marco de madera y la grapadora. El trabajo artesanal y personalizado que hay detrás de cada una de estas piezas resalta el aspecto escultórico de la práctica de Edmunds, alejándose de su aparente naturaleza ready-made.
La última vez que hablamos por teléfono, Ben también me habló de la metáfora sobre la necesidad de tener experiencias trascendentales, y cómo materializa esto a través de lo que él llama equipment of belief. Para mí, todas sus obras expresan esta idea, pero esto queda aún más claro en Clear Above, visibility unlimited y Infinite affinity.
Vale, pues tengo que desarrollar este concepto más en profundidad.
Ben Edmunds filtra el romanticismo y otras ideas tradicionalmente asociadas a movimientos pictóricos como el expresionismo abstracto a través de su marca registrada Aspirational Equipment (Equipamiento Aspiracional). De esta forma, el artista conecta con la búsqueda recurrente de un momento decisivo que las personas buscan a menudo cuando observan una pintura icónica o escalan una montaña. Basándose en la promesa de lograr ese escenario emocional, que ofrecen tanto el arte como los deportes de aventura, Edmunds suele describir sus obras como equipamientos de creencias: pinturas escultóricas que son medios para llegar a una experiencia, no la experiencia en sí.
Las piezas funcionan como una metáfora de un estado de ánimo romántico, pero también pueden contribuir a otras áreas del pensamiento creativo, desde enriquecer el lenguaje utilizado para definir el equipamiento deportivo hasta cuestionar algunos de los principios fundamentales de la historia del arte.
Materiales y producción, hecho. Equipamiento aspiracional, hecho. La búsqueda de la experiencia, hecho. ¿Qué más?
A continuación, podría hablar sobre la práctica de Ben en términos más amplios. Vuelvo a citar el texto de Cristina para Closer to the Wind:
“La práctica de Ben Edmunds puede verse como una investigación sobre el cruce de la pintura y el branding – quizás una idea chocante al principio, pero nada nuevo si consideramos las formas en las que un artista hace su trabajo para comunicar un mensaje, conecta emocionalmente con un mercado (en este caso el público del arte) y motiva a sus potenciales compradores. Haciendo referencia a Andy Warhol, – posiblemente el primer artista que se convirtió en su propia institución comercial -, Edmunds es muy consciente de su parte del sistema manteniendo una posición empática y crítica al mismo tiempo. El arte no sólo sigue una lógica de mercado, sino que también opera dentro de la esfera intelectual y emocional.”[2]
Bien, bien. ¿Algo más? ¿Debería presentar un par de ejemplos de obras incluidas en Everything we already had y relacionarlas con el enfoque general de Ben sobre la estética del arte? Podría funcionar.
A través de obras como AE-5.04 y Where are we now? II, el artista destaca la voluntad de llegar a algo. Edmunds se enfoca particularmente en explorar el acto de búsqueda, el proceso de moverse hacia algún lugar o hacia algo. Este movimiento no tiene por qué ser hacia adelante, funciona también hacia atrás, hacia los lados, hacia arriba y de la forma que sea necesaria, siempre que se comprometa con el acto simbólico y literal de mirar.
Sí. Creo que aquí hay algo. En ese caso, necesito una conclusión. Esta es siempre la parte más difícil. Me gustaría zanjarlo con el título, pero ¿se acepta esto en los manuales de escritura sobre arte? Bueno, en realidad estamos cuestionando las formas establecidas de consumir y hablar sobre arte, ¿verdad?
Everything we already had. Tiene relación con los títulos de las obras de Ben, es poético, conecta con el conjunto de obras presentado en Palma, es una conclusión, pero también es una continuación, es reflexivo. ¿Qué más puedo decir? Es que se trata de esto:
Everything we already had.
[1] Extracto del texto de Cristina Ramos para la exposición individual Closer to the Wind.
[2] idem
Aina Pomar Cloquell
